¿Goliat vs. Goliat?

El poder político de Trump se enfrenta al poder económico de Musk. ¿Quién tomará el papel de David en esta batalla entre gigantes?

Cortesía AP

Por La Redacción de Cobertura Especial

06 de junio de 2025.

Dos poderosas figuras enfrentadas: el hombre en autoridad máxima -Donald Trump- y el millonario de influencia global -Elon Musk-. Su división sacude aún más la poca estabilidad económica, política, militar y espiritual que vive el mundo.

La Biblia advierte sobre la corrupción y el orgullo en Proverbios 16:18, pero lo que estamos viendo ¿es una disputa justa por el bienestar de muchos? o ¿es solamente una pelea de egos?

Un breve contexto

A comienzos de junio de 2025, se desató una disputa pública entre el presidente Donald Trump y el magnate tecnológico Elon Musk. El conflicto nació cuando Musk criticó con dureza el proyecto de ley de gastos del presidente, al que calificó como una “abominación repugnante” por su impacto en la deuda nacional y la posible recesión.

Trump respondió de inmediato, amenazando con retirar los contratos gubernamentales de Musk, incluyendo acuerdos clave de SpaceX, y calificó al empresario de “haber perdido la razón”.

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La tensión escaló cuando Musk insinuó que Trump tenía vínculos con Jeffrey Epstein, el fallecido magnate señalado de promover la prostitución y tráfico de menores; y planteó retóricamente su posible impeachment (juicio político por mala conducta).

Musk llegó a amenazar con retirar la nave Dragon de operaciones, poniendo en peligro misiones de la NASA. Aunque el mercado recuperó algo de terreno después de este episodio de mensajes públicos en las redes sociales de ambos , Tesla, empresa del millonario, llegó a perder cerca de $150,000 millones en valor bursátil.

En esta guerra: ¿quién es David y quién es Goliat?

Ambos líderes tienen mucho que perder, pero de maneras distintas. Donald Trump: el político que depende de la élite empresarial.

Aunque Trump ha cimentado su imagen como defensor del libre mercado y amigo de la empresa privada, esta ruptura con Musk expone debilidades importantes:

Dependencia de aliados empresariales: Musk no solo representa innovación, sino también miles de millones de dólares en contratos federales clave para proyectos de defensa y tecnología espacial; además del apoyo político de $250 millones que aportó a la campaña de Trump. Una billetera que ha sido cerrada para Trump.

División interna en su base: muchos seguidores de Trump admiran el espíritu emprendedor y la innovación que promueve; pero un ataque directo contra Musk podría alejar a jóvenes y posibles aliados al ver “el pago” que recibe el ex “first buddy” (primer amigo presidencial).

Pérdida de la narrativa pro-empresarial: este conflicto desinfla la imagen de Trump como líder de la “economía moderna” y lo deja vulnerable a las críticas de que no protege la innovación ni a sus aliados.

Cortesía imagen de Matt Rourke / AP

Elon Musk: el millonario que necesita la política. El hombre más rico del mundo y pionero de la exploración espacial, también queda al descubierto:

Dependencia de contratos públicos: aunque Tesla y SpaceX dominan sus mercados, gran parte de sus ingresos provienen de contratos con el gobierno federal, especialmente con la NASA y el Pentágono. Un portazo de Trump podría poner en riesgo proyectos estratégicos.

Volatilidad de imagen: sus declaraciones impulsivas y sus tuits explosivos (en X) asustan a inversores y generan inestabilidad en los mercados, como demuestran las recientes caídas en las acciones de Tesla.

Necesidad de cooperación política: para avanzar en proyectos clave —como misiones espaciales y vehículos eléctricos— necesita el visto bueno de la Casa Blanca y del Congreso. Una mala relación con Trump complica sus planes y podría afectar la política industrial del país.

Entonces, ¿Ambos son David?

La historia de David y Goliat se encuentra en 1 Samuel 17:1-58. Narra la épica batalla entre el joven pastor David y el gigante filisteo Goliat, un guerrero temido que desafió al ejército de Israel.

Goliat medía más de 2,90 metros (según el texto bíblico) y se burló de los israelitas durante 40 días, desafiando a cualquiera que se atreviera a enfrentarlo. David, un joven pastor que cuidaba las ovejas de su padre, llegó al campamento para llevar provisiones a sus hermanos y escuchó el desafío de Goliat.

Confiando en Dios, David tomó su honda y cinco piedras lisas del arroyo. Con fe y valentía, lanzó una piedra que impactó en la frente de Goliat y lo derribó, matándolo y dando la victoria a Israel.

Una guerra sin ganadores

Aunque ambos poderosos actores siguen en pie, la pelea ha revelado sus vulnerabilidades:

Trump aparece como un político que no puede sostener alianzas empresariales clave sin entrar en conflicto.

Musk demuestra que su imperio tecnológico sigue dependiendo del favor político y del dinero público, contradiciendo su imagen de independencia absoluta.

A corto plazo, Musk podría perder más por la amenaza a sus contratos y su reputación bursátil. A largo plazo, Trump podría verse debilitado en un electorado que exige innovación y crecimiento económico.

En este duelo de titanes, ambos quedan expuestos como jugadores de poder con más dependencia mutua de la que sus discursos de fortaleza admiten.

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